Los puertos tipo C están por convertirse en un estándar para todos los dispositivos electrónicos, sin embargo existe una compañía que aun se resiste a este cambio.
La unión europea ha iniciado con esta iniciativa para que todos los fabricantes puedan compartir el mismo tipo de puerto, y así evitar el exceso de cables y cargadores que los usuarios tienen que adquirir y desechar cada año.